La frontera colombo-venezolana muestra este fin de año dos caras opuestas en materia de comercio. Del lado de Venezuela, muchos comerciantes lucen frustrados en San Antonio del Táchira. Mientras que en Cúcuta, las luces y los comercios abiertos revelan crecimiento económico.
Un paisaje desolador se percibe por las calles de San Antonio del Táchira, la ciudad venezolana de unos 220.000 habitantes que colinda con Cúcuta, Colombia, y que tuvo grandes expectativas de cerrar el año con una reactivación del comercio después de la reapertura de la frontera hace un poco más de un año.
Mientras, del lado colombiano los coloridos comercios hacen la diferencia.
La frontera entre Colombia y Venezuela estuvo cerrada por 7 años. En septiembre de 2022 se restablecieron las relaciones diplomáticas y comerciales entre ambos países, en virtud de uno de los principales objetivos en política exterior del presidente de Colombia Gustavo Petro tras asumir su cargo.
Pero las expectativas no se han cumplido para muchos, en momentos en que los locales cerrados y las aceras desoladas extrañan las épocas doradas cuando los colombianos cruzaban la frontera para comprar cuanto pudieran en suelo venezolano, de acuerdo con el testimonios de residentes de ambos lados consultados por la Voz de América.
“El comercio así como lo ves, paralizado totalmente", lamenta Juan Carlos Yonekura, comerciante venezolano residente de San Antonio del Táchira, mientras esperaba clientes en su negocio de piezas para vehículos.
"Esperábamos que este diciembre se presentara algo de una temporada donde pudiéramos sacar por lo menos esa pequeña o esa gran pérdida que hemos tenido durante todos estos años [sin comercio], pero realmente la afluencia de personas aquí en San Antonio es grave, muerta”, agrega con evidente decepción durante una entrevista reciente con la VOA.
La expectativa era similar para muchos comerciantes del lado de Colombia, quienes apuntaban a que la reapertura de las fronteras haría que Venezuela regresara a su posición de mercado natural para los productos colombianos, generando oportunidades y empleos en ambos lados.
No obstante, en aquel momento, parte del sector empresarial colombiano había advertido que mucho dependería del desempeño económico de Venezuela, una nación remecida por una sostenida crisis en todos los órdenes.
La contracción comercial visible en San Antonio no es exclusiva de ese territorio. De acuerdo con cálculos al margen del Banco Central de Venezuela, el tamaño de la economía se redujo un 80 % entre 2013 y 2021.
Sin embargo, el presidente de Venezuela Nicolás Maduro aseguró en noviembre que la actividad comercial registró signos de recuperación desde el segundo trimestre de 2021 de 3,7 % hasta el tercer trimestre del año en curso. Maduro fue incluso más optimista: "... y el cuarto trimestre a nivel comercial va a ser mejor".
Esfuerzos bilaterales
La apertura de las fronteras terrestre, marítima y aérea buscaban un mayor intercambio comercial, por lo que los gobiernos de Colombia y Venezuela instalaron en junio una Comisión de Vecindad e Integración, con la que ambos países buscarían impulsar y coordinar la cooperación e integración en las zonas de frontera.
Para entonces, las autoridades de los países vecinos prometieron entre otros temas, desarrollar planes de trabajo bilaterales, incluyendo la atención a las necesidades y prioridades de los departamentos fronterizos.
Según un análisis de las cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística de Colombia (DANE) que hizo la Cámara de Integración Económica Venezolano-Colombiana (Cavecol), en el período enero-mayo de 2023, se observó un aumento de las importaciones venezolanas de origen colombiano de 224 millones de dólares en 2022 a 247 millones de dóalres en 2023, lo que representa un incremento del 10 %.
En relación a las exportaciones venezolanas hacia Colombia se refleja un crecimiento del 117 % en comparación al mismo período de 2022, al pasar de 29,5 millones de dólares a 64 millones de dólares.
Pero que la balanza comercial entre ambos países esté inclinada en un 90 % a favor de Colombia, incrementa la frustración del lado venezolano.
El diputado de la asamblea nacional opositora, Juan Carlos Palencia, lamentó que hasta la fecha hay más exportaciones de Colombia a Venezuela que de Venezuela a Colombia.
“San Antonio-Cúcuta era la frontera más activa de América Latina", recuerda Palencia.
"Había un intercambio comercial de 8.000 millones de dólares anuales, venían las aduanas de otros países para mirar, observar lo bonito que era este intercambio comercial”, afirmó el diputado opositor en alusión a los años previos al rompimiento de relaciones diplomáticas y comerciales entre ambas naciones vecinas.
Cúcuta Vs San Antonio
Cúcuta es una ciudad de 750.000 habitantes que ha abierto las puertas a los venezolanos de distintos lugares del país. Hasta allí han ido llegando miles de ellos de forma temporal para recibir atención médica o hacer compras. Otros se quedaron a vivir a fin de procurarse un futuro mejor desde que comenzó la crisis en todos los órdenes que ha enfrentado Venezuela en los últimos años.
De acuerdo con cifras del Ministerio de Comercio de Colombia, desde septiembre de 2022 hasta julio de 2023 se han registrado 591.2 millones de dólares en exportaciones hacia el vecino país, comparado con 485.3 millones de dólares reportados el año anterior.
“Vemos la desigualdad, mientras Cúcuta sigue creciendo, San Antonio se va quedando olvidada y rezagada porque no hay voluntad política por parte de Caracas de potenciar a San Antonio, de abrir nuevas plazas de trabajo e invertir en materia de vialidad, en mejoras de servicio, en dar microcréditos a los empresarios para que puedan emprender y puedan ofrecer sus productos”, opina el diputado Palencia.
VOA