La organización Un Mundo Sin Mordaza publicó su más reciente investigación, titulada Venezuela en Cifras 2024, en el que documenta un alarmante incremento de la represión en todos los ámbitos de la vida nacional.
Basado en datos oficiales y fuentes independientes, el informe expone cómo se ha consolidado un patrón de persecución, criminalización y control social que vulnera derechos fundamentales.
En lo que va de año, se registraron más de 190 ataques a periodistas, activistas y ciudadanos, incluyendo amenazas, hostigamientos, agresiones físicas y detenciones arbitrarias. El informe concluye que, en Venezuela, alzar la voz sigue siendo una actividad de alto riesgo.
Colapso económico en un entorno marcado por la represión
El deterioro no se limita a lo político. En medio de salarios congelados en 2,5 dólares mensuales, inflación del 85% y una canasta básica de casi 500 dólares, la población enfrenta pobreza extrema y una precariedad generalizada. A esto se suma el colapso de los servicios públicos: cortes de agua, apagones prolongados y escaso acceso al gas y al transporte.
Aunque el informe destaca estos datos económicos, también señala que cualquier manifestación de protesta o exigencia ciudadana es rápidamente sofocada mediante mecanismos de represión, lo que impide canales de participación democrática.
Represión también en los procesos electorales
El informe destaca que las elecciones presidenciales de julio de 2024 estuvieron lejos de ser libres y transparentes. Se reportaron más de 20 inhabilitaciones políticas, fallas en el 25% de los centros de votación y una mínima inscripción de votantes en el exterior, a pesar de que hay más de 7 millones de migrantes venezolanos.
La ausencia de observación internacional y las trabas administrativas evidencian un sistema electoral cerrado y sin garantías. Aunque no se mencione de forma directa en este punto, el trasfondo de muchas de estas irregularidades se relaciona con la misma política de control y silencio que caracteriza la represión institucional.
Educación, salud y seguridad en estado crítico
El sistema educativo muestra resultados alarmantes: más del 70% de los estudiantes reprueban en matemáticas, comprensión lectora y habilidades verbales. Las universidades, además, acumulan más de 1.000 días sin aumento salarial. En salud, el desabastecimiento alcanza el 36% y el 91% de los hospitales exige que los pacientes lleven sus propios insumos.
En paralelo, la violencia ejercida desde el poder ha cobrado cientos de vidas. El informe registra 522 asesinatos cometidos por cuerpos de seguridad del Estado, y más de 2.600 detenciones arbitrarias durante el segundo semestre del año, muchas de ellas vinculadas a protestas postelectorales. La represión se evidencia no solo en la censura, sino también en la represión física y judicial contra quienes disienten.
Llamado urgente a la comunidad internacional
Un Mundo Sin Mordaza concluye que Venezuela vive una emergencia total. Con una institucionalidad degradada y sin acceso a mecanismos de defensa efectiva, la población se enfrenta a un sistema que normaliza la represión como método de control. La organización hace un llamado a los organismos internacionales, medios de comunicación y ciudadanos del mundo a visibilizar esta realidad.
El Carabobeño