Este 23 de septiembre de 2025 se marcan dos meses desde que Albany Colmenares y Nikoll Arteaga, dirigentes de Vente Venezuela en Carabobo, fueron privados de libertad. Ambos permanecen bajo detención arbitraria y son reconocidos en la entidad como líderes comunitarios comprometidos con la democracia y el servicio ciudadano.
Desde el partido político en el que militan aseguraron que se trata de un encarcelamiento injusto, motivado únicamente por difundir un mensaje de libertad y cambio en Carabobo y en todo el país.
Riesgos denunciados por la CIDH
La detención arbitraria en Venezuela no solo afecta a Albany Colmenares y Nikoll Arteaga. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) advirtió que la vida e integridad de Colmenares corren grave peligro, por lo que le otorgó medidas cautelares.
Este pronunciamiento se sumó a la voz de organismos internacionales y organizaciones de derechos humanos que coinciden en la urgencia de liberar a ambos dirigentes.
Detención arbitraria conocida por la ONU
La situación también fue expuesta el 22 de septiembre en la 80ª Asamblea General de la ONU, donde se documentaron casos de ejecuciones extrajudiciales, torturas y privativas de libertad ilegales en Venezuela. El caso de Albany y Nikoll fue citado como ejemplo de esta escalada represiva y de detención arbitraria contra quienes defienden la democracia.
Desde Vente Venezuela se reiteró el llamado: “Exigimos la liberación inmediata de Albany y Nikoll”. El movimiento recordó que no son hechos aislados, sino parte de una realidad que incluye cientos de presos y perseguidos políticos en el país.
Por ello, exhortaron a la comunidad internacional y a la sociedad civil a mantener la presión y la solidaridad activa hasta que los jóvenes puedan regresar a sus hogares.
La dirigencia nacional de Vente Venezuela subrayó que la detención arbitraria en Venezuela no se mide en cifras, sino en vidas que han sido interrumpidas. “Albany y Nikoll son líderes, amigos e hijos. Su libertad es también la libertad de Venezuela”, señalaron.
La detención de ambos ocurrió la tarde del 24 de julio. Dos días después de los comicios presidenciales de 2024, Colmenares denunció que ocho sujetos armados irrumpieron en su casa agrediendo a su familia.
Por varias semanas reportó ser vigilada por patrullas del Sebin que rondaban la calle donde está su residencia familiar, en el municipio Naguanagua.
Con información de nota de prensa